Ya
hace años que murió Zurita, y en Lugarucos cada vez que se trata de
comer pescado, nunca falta quien diga:
-¿Se
acuerdan ustedes de las calderetas de aquel catedrático de
Psicología y Lógica?
-¡Ah,
Zurita!
-¡El
gran Zurita!
Y
a todos se les hace la boca agua.
Oviedo,
1884.
1.028. Alas «Clarin» (Leopoldo)
No hay comentarios:
Publicar un comentario